For nearly two decades, Mercosur and the European Union discuss an agreement to liberalize trade between the two economic blocs.
However, economic asymmetries and conflicts of interest in areas such as government procurement and protectionism for the agricultural sector hinder the parties come to an agreement.
Recently the subject returned to the scene, with pressure on Brazil and Argentina to prioritize negotiations on tariff liberalization.
On the one hand there are optimistic analysis that indicate that international trade may be favored, on the other hand there are critics who suggest that trade liberalization with more advanced economies, like the US and the EU, can bring more risks to the Mercosur economies than opportunities .
Read the analysis published here on Missão Diplomática of Carta Capital article commenting pressures on Brazil and Argentina for liberalization ("Relações Mercosul e UE (1): Liberalizar ou não liberalizar, eis a questão"), and also another article with critical insight into the dangers for Brazil and the Mercosur on trade liberalization with wealthier countries ("Relações Mercosul e UE (2): Liberalizar ou não liberalizar, eis a questão").
Read below the optimistic analysis of the Folha de São Paulo on trade liberalization with the United States and European Union.
Same article in English and Spanish. (from Folha International)
Deals With US and Europe Could Increase Brazil´s Trade by 18%
by Raquel Landim
26.Mar.2014
If Brazil had the key to the two largest markets in the world (the US and Europe) it would see its foreign trade jump 18% or US$ 86 billion a year.
The net result of these two free trade agreements would however create a deficit of US$ 600 million as exports would grow US$ 42.8 billion while imports would increase by $ 43.4 billion.
The calculations were done by professors Vera Thorstensen and Lucas Ferraz of the Getulio Vargas Foundation for the Institute of Industrial Development Studies (IEDI), that brings together 44 leaders of large companies such as Embraer, Gerdau, CSN and Cosan.
The researchers took in to account a 100% reduction in industrial tariffs, 70% in agricultural tariffs and a 25% drop in tax barriers to trade such as customs paperwork as well as technical and sanitary requirements.
They used mathematical models from the Global Trade Analysis Project, a global network that collects data for 57 sectors in 153 regions. For the technical barriers they referred to a European Commission study.
An agreement with Europe which has been under negotiation for the past 14 years and which has now become a priority for the Dilma administration would generate US$ 28.1 billion in exports and US$ 28.1 billion in imports.
The deal with the United States, who are currently off the government´s radar, would mean US$ 14.7 billion in exports and US$ 15.3 billion in imports.
"The agreements could generate a deficit in the short term but they are the only way for us to integrate the global production chain and improve our productivity. We cannot isolate ourselves," said Pedro Passos, IEDI president and Board Member of Natura.
The Foreign Affairs Ministry announced that Brazil has "a wide range" of agreements with Latin America, free trade agreements with Israel, Palestine and Egypt and partial agreements with India and South Africa. It is also negotiating with Europe.
Businessmen complain of the deals´ scope and say that the country is lagging behind. Industry is in favour of freeing up the market even if predictions suggest many sectors could lose out and will need time to adapt.
"We need to negotiate on many fronts at the same time to have more bargaining power. That way you can create competition for your market and gain more concessions," said Diego Bonomo, Executive Manager of the National Confederation of Industry. Deals with the US, EU, Japan, Canada and Mexico are a priority, he says.
The IEDI study also considered free trade agreements with eight more countries including China, Russia and South Africa. But the effects of trade liberalization with the US and EU are far more important.
TECHNICAL BARRIERS
As import tariffs in rich countries are low, it is with the technical and environmental restrictions where half the profits are to be made. "Brazil´s foreign trade policy is out of date. There is not point negotiating tariffs when the world is discussing regulations," said Thorstensen.
As was revealed to Folha by Brazilian negotiators who preferred to remain anonymous, the country has already adopted its new agenda. The deal with the EU plans to drop technical and sanitary barriers but the negotiations remained locked on the issue of tariffs.
The two parties were unable to reach an agreement at a meeting in Brussels last week.
Translated by MILLI LEGRAIN
Acuerdos con Estados Unidos y Europa representarían para Brasil un alta del 18 % en el comercio
por Raquel Landim
Si se pudiera abrir a los dos mercados más grandes del mundo (Estados Unidos y la Unión Europea ), Brasil tendría un impulso en el comercio exterior de 86.000 millones de dólares al año, un 18 % más de lo que el país realiza en transacciones hoy.
El resultado neto de estos dos acuerdos de libre comercio, sin embargo, sería un déficit de 600 millones de dólares, ya que las exportaciones crecerían 42.800 millones de dólares, mientras que las importaciones avanzarían 43.400 millones de dólares.
Los cálculos fueron realizados por los profesores Vera Thorstensen y Lucas Ferraz, de la FGV, a pedido del Instituto de Estudios para el Desarrollo Industrial (Iedi), que reúne a 44 líderes de las principales empresas, como Embraer, Gerdau, CSN y Cosan.
Los investigadores consideran una reducción del 100% de los aranceles industriales, un 70% de los aranceles agrícolas y una disminución del 25% en las barreras impuestas al comercio, como los trámites de aduana y las exigencias técnicas y sanitarias.
Se utilizaron modelos matemáticos del GTAP (Global Trade Analysis Project), una red mundial que recogió datos para 57 sectores en 153 regiones. Por barreras técnicas, trabajaron con un estudio de la Comisión Europea.
Un acuerdo con Europa, que está negociándose desde hace 14 años y hoy se volvió una prioridad para la administración de Dilma, generaría más de 28.000 millones de dólares en exportaciones y otros 28.100 millones de dólares en importaciones.
Con Estados Unidos, que salió del radar del gobierno, significaría 14.700 millones de dólares en exportaciones y 15.300 millones de dólares en importaciones.
"Los acuerdos pueden incluso generar déficit en el corto plazo, pero son la única manera de integrarnos en las cadenas productivas mundiales y mejorar nuestra productividad. No podemos aislarnos", dijo Pedro Passos, presidente del Iedi y socio de Natura.
El Ministerio de Relaciones Exteriores dijo en un comunicado que Brasil tiene una red "extensa" de acuerdos en América latina, acuerdos de libre comercio con Israel, Palestina y Egipto y acuerdos parciales con India y Sudáfrica. Además, se encuentra negociando con el bloque europeo.
Los empresarios se quejan de la magnitud de estos acuerdos, y dicen que el país está atrasado. La industria está a favor de la apertura del mercado, a pesar de que las simulaciones indican que varios sectores podrían enfrentar pérdidas y necesitarán tiempo para adaptarse.
"Tenemos que abrir muchos frentes al mismo tiempo para tener más poder de negociación. De este modo, se crea una competencia para el mercado y se obtienen más concesiones", dice Diego Bonomo, director ejecutivo de la CNI (Confederación Nacional de Industria). Él cita como convenios prioritarios aquellos con Estados Unidos, la UE, Japón, Canadá y México
La encuesta de Iedi también estima el impacto de los acuerdos de libre comercio con otros ocho países, entre ellos China, Rusia y Sudáfrica, pero los efectos de la liberalización del comercio con los Estados Unidos y la Unión Europea son mucho más altos que los demás.
OBSTÁCULOS TÉCNICOS
Como los aranceles de importación de los países ricos son bajos, es en la reducción de las restricciones técnicas y ambientales que se encuentra la mitad de las ganancias esperadas. "La política de comercio exterior de Brasil es anacrónica. Negociar tarifas no sirve cuando el mundo habla de estándares", dijo Thorstensen.
Según Folha averiguó con los negociadores brasileños que pidieron el anonimato, el país ya entró en una nueva agenda. El acuerdo con la UE predice la caída de las barreras sanitarias y técnicas, pero las conversaciones se detuvieron a la espera de que se destrabe la negociación de los aranceles. En una reunión en Bruselas la semana pasada, los dos bloques no lograron marcar un canje de ofertas.
Traducido por NATALIA FABENI
fonte: Folha Internacional
Nenhum comentário:
Postar um comentário